Congestión, histeria y drama, son algunos adjetivos que ensamblan la situación vivida hoy por las angostas calles del país. En especial, la capital se vio colapsada por este regreso masivo de escolares, universitarios y trabajadores en el llamado súper lunes de marzo. Las caras acongojadas y perdidas en su somnolencia se hicieron frecuentes en el sistema de transporte y en las aglomeraciones que siempre se forman en los lugares más álgidos de la capital.
Pero también fue un momento de felicidad para muchas personas que les tocó ingresar por primera vez a la universidad por que, gran parte de éstas retomaron la rutina de trabajo hoy. Finis Terrae, Diego Portales y De los Andes son sólo algunas de las instituciones que recibieron únicamente a los nuevos alumnos con algún tipo de evento, cocaví, celebración, reunión, cóctel y/o discursos de relleno sin sentido. Proceso que últimamente se hace necesario para el inicio del semestre curricular.
Si bien la gran mayoría de las instituciones de educación superior tradicionales, llámese Universidad de Chile, Pontificia Universidad Católica de Chile y la Universidad de Santiago (USACH), ya comenzaron con las clases, son principalmente las universidades privadas las que concentraron alumnos este “súper lunes”. Rafael Martínez, cursa tercer año de Ingeniería Civil Industrial en la Universidad Adolfo Ibáñez, es monitor de las actividades de bienvenidas de la universidad. “Estoy encargado de los mechoneos sociales y todo lo que tenga que ver con los alumnos nuevos, por ejemplo, si vamos a plantar árboles o armar casas yo superviso a los alumnos mientras lo hacen y ayudo también”. A lo que agrega que la elección de participar de esta manera, fue por un servicio e integración social.
Por otro lado, la incertidumbre reina en el DUOC de Viña del Mar, donde Roma Leiva, estudiante de Diseño, dice que en su carrera no están claras las actividades para los alumnos nuevos y cómo se implementará su integración con los pupilos de distintos años. “Siempre hacen actividades para los mechones, son súper entretes y siempre participo, aunque no tengo claro bien que se hará este año, intentaré asistir para pasar un buen rato” sostiene Leiva.
En realidad, todas las universidades tienen distintos métodos para integrar a sus alumnos con el medio y la infraestructura de cada institución, para que así los alumnos se sientan cómodos e incluidos en la sociedad universitaria. Por ejemplo, mientras la Finis Terrae regalaba hamburguesas a todos sus alumnos, la UDP entregaba carpetas con lo necesario para empezar el semestre.
El regreso a clases en el súper lunes
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